4 conceptos fundamentales a la hora de encofrar columnas o pilares
Antes de hablar sobre encofrados de columnas, primero es fundamental saber su significado.
Las columnas o pilares son elementos verticales que soportan fuerzas de compresión y flexión, transmitiendo todas las cargas de la estructura a la cimentación. Son uno de los elementos más importantes para el soporte de la estructura, por lo tanto, su ejecución requiere una especial atención.
En los pilares, el acero de armadura está formado por barras longitudinales para resistir a flexo tracción, y los estribos, para evitar el pandeo del elemento.
Seguramente sabrás que existen muchos tipos de columnas o pilares según su tipología constructiva (pilares metálicos, prefabricados, in situ, etc). En este artículo vamos a hablar de los pilares hormigonados in situ.
¡Vamos entonces a ver las 4 preguntas más importantes sobre el encofrado para pilares!
1.- ¿Qué tipos de pilares existen?
En la construcción, y especialmente en la edificación, existen varios tipos de columnas o pilares, que se pueden clasificar según su sección.
- Pilar circular: Tiene sección circular, con variación de diámetro según el diseño y solicitaciones, su uso es fundamentalmente en zonas donde se busca un acabado visto, no se suelen revestir (halls de edificios, aeropuertos, centros comercials,…)
- Pilar cuadrado/rectangular: Es la sección más utilizada, por la sencillez de diseño y ejecución, nos las podemos encontrar en todo tipo de construcciones, vistas, revestidas, con cambios de sección en incluso combinadas, caras rectas con caras circulares.
- Pilar apantallado: Hermanas de los pilares cuadrados o rectangulares. La principal diferencia es que tienen una cara larga que suele ser mucho más grande que la corta, prácticamente como un muro. Su uso suele estar vinculado a las solicitaciones estructurales, rigidizando estructuras ante los esfuerzos horizontales, como pueden ser vientos, sismos, etc.
2.- ¿Qué tipos de encofrado se pueden utilizar?
Los orígenes de los encofrados de columnas se remontan a la época del Imperio Romano, en el siglo I, cuando en sus construcciones comienzan a utilizar en Opus caementicium u hormigón romano, el cual requería un molde para su contención.
Se denomina encofrado de columna o pilar, al molde formado por un conjunto de paneles metálicos, de madera, o de plástico, que se utilizan para contener el hormigón hasta que se logra su fraguado o endurecimiento, dando forma a las columnas.
¿Qué tipos de encofrado para columnas existen?
Existen básicamente 3 tipologías de encofrado para pilares:
1.- Encofrado de madera:
Es la tipología de encofrado más antigua y ‘tradicional’. En este caso el encofrado está formado por 4 piezas de madera cortadas a medida, rodeadas por una serie de barrotes, crucetas o abrazaderas de madera (o metálicas) cuya función es soportar la presión del hormigón. Es un encofrado económico, pero de menor productividad con respecto a las otras tipologías.
2.- Encofrado Industrializados:
Se trata de un tipo de encofrado, el cual está formado por paneles diseñados para ser reutilizados, con el objeto de soportar ciertas solicitaciones, conseguir ciertos objetivos de productividad en obra y un acabado con una calidad uniforme. Los procesos de montaje y desmontaje suelen estar orientados a conseguir los objetivos nombrados.
En caso de pilares circulares, existen más opciones:
1.-Encofrado de cartón: es el encofrado más utilizado cuando hay que ejecutar pocos pilares. De hecho, este tipo de encofrado permite solo 1 (una) hormigonada, luego ya no es reutilizable. En ocasiones, puede dejar la forma de ‘espiral’ del cartón en su acabado.
2.- Encofrado en fibra de vidrio: Esta tipología de encofrado tiene la ventaja de combinar la capacidad de reutilización y la de ser manuportable, y deja un acabado visto de excelente calidad.
3.- Encofrado metálico: el encofrado metálico tiene la ventaja de tener una vida útil muy larga, es reutilizable, pero no suele ser manuportable (está vinculado al uso de grúa).
3.- ¿Cuándo se desencofra un encofrado de columna?
El desencofrado consiste en la retirada de los encofrados que han contenido el hormigón colado durante toda la fase de curado.
Según la normativa la decisión del tiempo de desencofrado corresponde al director de obra: sin embargo, tal operación no debe tener lugar nunca antes de que la resistencia del hormigón haya alcanzado el valor necesario, en relación con el uso de la estructura, en el momento de la retirada del encofrado.
A falta de ensayos específicos de resistencia del hormigón, y en condiciones normales de ejecución y ambientales de curado, se suele desencofrar columnas entre las 24h y 72h después de la colada u hormigonado.
4.- ¿Cómo obtener el mejor rendimiento?
Para obtener un buen rendimiento en la ejecución de pilares, es necesario suministrar la cantidad de equipos de encofrados adecuada, definir los encofrados adecuados, en función del ritmo de ejecución.
Para ello es recomendable estudiar con detalle todo el proceso constructivo teniendo en cuenta los equipos, los medios necesarios, el coste en tiempos de montaje y desmontaje, y los periodos de curado.
Conclusiones
La ejecución de los pilares quizás es la parte más “fácil” a la hora de ejecutar una estructura de hormigón. A pesar de ello, es importante escoger la tipología de encofrado más adecuada, en función de los ritmos de producción y de la mano de obra disponible, para evitar problemas de rendimiento o sobre costes durante la ejecución.